Modernismo y generación del 98 (4ºESO)

¿De dónde venimos? ¿Quiénes somos? ¿Adónde vamos? (Paul Gaugin) 1897

Contexto histórico del fin de siglo XIX

Antecedentes:

  • Desde Francia se extiende por toda Europa el «mal de fin de siglo»-> estado de desilusión y crisis de conciencia colectiva provocada por:
    • Decadencia de los valores de la burguesía
    • Crisis racionalismo: el mundo es imposible de conocer o abarcar a través de la razón.
    • Existencialismo, Nihilismo =>pesimismo existencial: Kierkegaard, Nietzsche, Schopenhauer…

Dios ha muerto. Dios sigue muerto. Y nosotros lo hemos matado. ¿Cómo podríamos reconfortarnos, los asesinos de todos los asesinos? El más santo y el más poderoso que el mundo ha poseído se ha desangrado bajo nuestros cuchillos: ¿quién limpiará esta sangre de nosotros? ¿Qué agua nos limpiará? ¿Qué rito expiatorio, qué juegos sagrados deberíamos inventar? ¿No es la grandeza de este hecho demasiado grande para nosotros? ¿Debemos aparecer dignos de ella?

Nietzsche, La gaya ciencia, sección 125 (1882)
  • En España: en 1898 tuvo lugar un acontecimiento que marcó profundamente a todos los españoles: el desastre del 98. Se denomina con este nombre a la pérdida de las últimas colonias españolas: Cuba y Filipinas. Esta derrota => símbolo de la decadencia del país.
  • En esta época se agravan los problemas sociales, que habían aparecido con la implantación de la Revolución Industrial. Los obreros comienzan a organizarse en sindicatos, y surgen las organizaciones y los partidos, como el partido socialista obrero español fundado por Pablo Iglesias en 1879.
  • En el siglo XX continúa la inestabilidad política del siglo anterior. Con Alfonso XII se llega un acuerdo, que consiste en un turno pacífico en el poder entre conservadores y liberales. El sistema canovista no tendrá la capacidad de detener el choque inminente entre las dos Españas.

Límites entre modernismo y generación del 98

Entre la generación del 98 y el Modernismo no hubo una absoluta separación. Ambos se van a desarrollar de forma paralela y su influencia recíproca fue considerable.

La importancia del simbolismo-> los poetas malditos franceses

Les Fleurs du Mal (Las Flores del Mal) es una colección de poemas escrita por el poeta francés Charles Baudelaire, publicada por primera vez en 1857. Esta obra, aunque hoy en día se considera una obra maestra de la poesía simbolista, generó una gran polémica en su época.

  • Contenido erótico y sensual: Baudelaire abordó temas considerados tabú en su época, como la sensualidad, el erotismo y la decadencia. Sus poemas exploran la lujuria, la angustia y el placer de manera provocativa, desafiando las normas morales y sociales de la sociedad del siglo XIX.
  • Pesimismo y decadentismo: La obra refleja un tono pesimista y una visión decadente de la vida. Baudelaire se sumerge en la exploración de la belleza efímera, la decadencia de la sociedad y la atracción por lo oscuro. Esto contrastaba con las ideas optimistas y el idealismo romántico predominante en la época.
  • Crítica a la religión y la moralidad: Baudelaire cuestionó la moralidad tradicional y desafió las normas religiosas en muchos de sus poemas. Algunos de sus versos fueron considerados blasfemos y ofensivos, lo que provocó la censura de ciertos poemas y llevó a procesos judiciales contra el autor y los editores.
  • Rechazo a las convenciones literarias: Baudelaire rompió con las convenciones literarias de la época, adoptando un lenguaje más moderno y experimental. Su poesía, rica en simbolismo, a menudo se alejaba de las estructuras tradicionales, desafiando las expectativas de los lectores y críticos.
  • Innovación formal: Baudelaire introdujo una serie de innovaciones formales en «Las Flores del Mal», como el uso del verso libre y la combinación de estilos poéticos. Estos elementos contribuyeron a la percepción de su obra como vanguardista, pero también generaron resistencia y críticas por parte de aquellos que preferían formas más convencionales.
  • Proceso judicial y censura: A raíz de la controversia, seis poemas de «Las Flores del Mal» fueron considerados ofensivos por su contenido erótico y fueron censurados. Baudelaire y los editores fueron juzgados y condenados por «ultraje a la moral pública». La obra fue parcialmente suprimida, y Baudelaire tuvo que pagar multas.

Obsesión- LAS FLORES DEL MAL (BAUDELAIRE)
Vosotros, altos bosques, me amedrentáis como catedrales;
aulláis igual que el órgano; y en nuestros corazones malditos,
cámaras de duelo eterno donde resuenan antiguos estertores,
se repiten los ecos de vuestros De profundis.
¡Océano, te odio! Tus brincos y tumultos
los encuentra mi espíritu en sí; la risa amarga
del hombre derrotado, llena de sollozos y de insultos,
yo la escucho en la risa tremenda de la mar.
¡Cómo me gustarías, oh noche, sin esas estrellas
cuya luz habla un lenguaje consabido!
¡Pues yo busco el vacío, y lo negro, y lo desnudo!
Pero las tinieblas son también ellas lienzos
donde viven, brotando de mis ojos a miles,
seres desaparecidos de miradas familiares.

Lesbos
Madre de antiguos juegos y dulces melodías,
Lesbos, donde los besos, lánguidos o imperiosos,
Cálidos como soles, frescos como sandías,
Engalanan las noches y los días gloriosos;
Madre de antiguos juegos y dulces melodías,

Lesbos, donde los besos son como las cascadas
Que a los negros abismos se arrojan impacientes,
Y corren, sollozando y cloqueando en oleadas,
Tormentosas, secretas, profundas, febricientes;
¡Lesbos, donde los besos son como las cascadas!

Lesbos, donde se aman las Frinés si se miran,
Donde jamás sin eco un suspiro quedara,
Como también a Pafos las estrellas te admiran,
¡Y Venus con razón a Safo la celara!
Lesbos, donde se aman las Frinés si se miran,

¡Lesbos, tierra de noches lánguidas y calientes,
Donde discurre estéril la voluptuosidad!
Claros espejos donde bellas adolescentes
Acarician los frutos de su nubilidad;
Lesbos, tierra de noches lánguidas y calientes,

Deja a Platón fruncir el ceño venerable;
Tú obtienes el perdón con besos infinitos,
Reina del dulce imperio, tierra noble y amable,
Y tus inagotables tranportes exquisitos.
Deja a Platón fruncir el ceño venerable.

¡Tú obtienes el perdón de la infinita pena,
Que aflige a los que sufren insaciables anhelos,
Y aleja de nosotros la sonrisa serena
Vagamente entrevista al borde de otros cielos!
¡Tú obtienes el perdón de la infinita pena!

¿Quién de los Dioses, Lesbos, se atreverá a juzgarte
Y condenar acaso tus tiernos desvaríos,
Si en sus balanzas de oro no pone de tu parte
Las lágrimas que al mar arrojaron tus ríos?
¿Quién de los Dioses, Lesbos, se atreverá a juzgarte?

¿Qué nos quieren las leyes de lo justo y lo injusto?
Vírgenes de sublime hermosura sin velo,
¡El rito vuestro como todo rito es augusto,
Y el amor se reirá del Infierno y del Cielo!
¿Qué nos quieren las leyes de lo justo y lo injusto?
(...)
  • Edgar Allan Poe como principal precedente de los poetas malditos:

El Modernismo

  • El Modernismo es un movimiento literario liderado por Rubén Darío que defiende el arte por el arte y la búsqueda de la belleza. «El encuentro de nuevo con la belleza, sepultada durante el siglo XIX». (Juan Ramón Jiménez)
  • Se desarrolla aproximadamente entre 1885 y 1915. Alcanza su plenitud con la publicación de Azul (1888) de Rubén Darío.
  • Influencias principales:
    • Romanticismo.
    • Parnasianismo: movimiento literario francés posromántico que defiende el «arte por el arte» =>El arte no tiene que ser útil, ha de perseguir únicamente la belleza.
    • Simbolismo: en su Arte poética el poeta maldito francés Verlaine defiende el valor de los símbolos como modos de evocar realidad más profundas. Los poetas tratan de descubrir, a través de los símbolos, una realidad oculta tras las el falso mundo de las apariencias. Los simbolistas sugieren y representan impresiones subjetivas. No hay una comunicación directa y objetiva con el receptor. Ejemplos: las sombras de Rosalía de Castro o la luna en Lorca
  • Características del modernismo
    1. Idealismo: Necesidad de evadirse de la realidad mediante mundos mitológicos, fantásticos o perfectos.
    2. Anticonformismo: el sentimiento de libertad, ajeno a toda norma social, moral o regla estética, cristaliza en una actitud rebelde.
    3. Esteticismo: exaltación de la Belleza como fin principal.
  • Recursos estilísticos:
    • Musicalidad: aliteraciones, juegos fónicos, utilización de palabras esdrújulas. 
    • Léxico sonoro y ornamental: aparición de un vocabulario exótico (heliótropo,  clámides, acanto, plinto ), nombres mitológicos ( Venus, Adonis , ninfas, sátiros ), realidades misteriosas (castillos, odaliscas, marquesas, unicornio)
    • Evocación sensorial: «el modernismo es una literatura de los sentidos» (Salinas). Empleo de sinestesias (verde chillón, soledad sonora) , imágenes deslumbrantes, adjetivación sensitiva.
    • Renovación formal de la métrica:
      • Asimilación de versos y estrofas procedentes de Francia, como el dodecasílabo o el eneasílabo.
      • Resurrecciones de formas antiguas o poco utilizadas como el alejandrino.
      • Innovaciones: se crean nuevos versos de hasta 20 sílabas y se desarrolla el uso del verso libre
      • Se cultivan los versos consagrados: endecasílabo. Forma métrica del soneto.
  • Temáticas modernistas: la recreación del pasado y la invención de mundos imaginarios conviven con otros motivos que apuntan a una clara influencia romántica:
    • La pasión frente a la razón. La literatura da entrada de nuevo a lo onírico, lo misterioso y lo sobrenatural sobre toda imposición concreta de la realidad.
    • El amor y el erotismo. El tratamiento de ambos aspectos apunta en dos direcciones: una, la idealización del amor y de la mujer, mundo inalcanzable que sume al poeta en la más profunda tristeza; otra, el erotismo desenfrenado, encarnado en la mujer fatal, lasciva y dominadora 

AUTORES MODERNISTAS:

  • Rubén Darío (el maestro con Azul y Cantos de vida y esperanza. )
  • En Hispanoamérica: José Martí, José Asunción Silva, Amado Nervo, Delmira Agustini.
  • En España destacan hermanos Manuel y Antonio Machado (La época de Soledades; su obra posterior suele incluirse entre los noventayochistas), Valle-Inclán y Juan Ramón Jiménez (ambos en sus primeras etapas).  

Selección poética-> Rubén Darío

"Venus" (AZUL) 
En la tranquila noche, mis nostalgias amargas sufría.
En busca de quietud, bajé al fresco y callado jardín.
En el oscuro cielo, Venus bella temblando lucía,
como incrustado en ébano un dorado y divino jazmín.

A mi alma enamorada, una reina oriental parecía,
que esperaba a su amante, bajo el techo de su camarín,
o que, llevada en hombros, la profunda extensión recorría,
triunfante y luminosa, recostada sobre un palanquín.

«¡Oh reina rubia! -dije-, mi alma quiere dejar su crisálida
y volar hacia ti, y tus labios de fuego besar;
y flotar en el nimbo que derrama en tu frente luz pálida,

y en siderales éxtasis no dejarte un momento de amar.»
El aire de la noche, refrescaba la atmósfera cálida.
Venus, desde el abismo, me miraba con triste mirar.

"Sonatina" (PROSAS PROFANAS)
La princesa está triste… ¿qué tendrá la princesa?
Los suspiros se escapan de su boca de fresa,
que ha perdido la risa, que ha perdido el color.
La princesa está pálida en su silla de oro,
está mudo el teclado de su clave de oro;
y en un vaso olvidado se desmaya una flor.

El jardín puebla el triunfo de los pavos-reales.
Parlanchina, la dueña dice cosas banales,
y, vestido de rojo, piruetea el bufón.
La princesa no ríe, la princesa no siente;
la princesa persigue por el cielo de Oriente
la libélula vaga de una vaga ilusión.

¿Piensa acaso en el príncipe del Golconsa o de China,
o en el que ha detenido su carroza argentina
para ver de sus ojos la dulzura de luz?
¿O en el rey de las Islas de las Rosas fragantes,
o en el que es soberano de los claros diamantes,
o en el dueño orgulloso de las perlas de Ormuz?

¡Ay! La pobre princesa de la boca de rosa
quiere ser golondrina, quiere ser mariposa,
tener alas ligeras, bajo el cielo volar,
ir al sol por la escala luminosa de un rayo,
saludar a los lirios con los versos de mayo,
o perderse en el viento sobre el trueno del mar.

Ya no quiere el palacio, ni la rueca de plata,
ni el halcón encantado, ni el bufón escarlata,
ni los cisnes unánimes en el lago de azur.
Y están tristes las flores por la flor de la corte;
los jazmines de Oriente, los nulumbos del Norte,
de Occidente las dalias y las rosas del Sur.

¡Pobrecita princesa de los ojos azules!
Está presa en sus oros, está presa en sus tules,
en la jaula de mármol del palacio real,
el palacio soberbio que vigilan los guardas,
que custodian cien negros con sus cien alabardas,
un lebrel que no duerme y un dragón colosal.

¡Oh quién fuera hipsipila que dejó la crisálida!
La princesa está triste. La princesa está pálida…
¡Oh visión adorada de oro, rosa y marfil!
¡Quién volara a la tierra donde un príncipe existe
La princesa está pálida. La princesa está triste…
más brillante que el alba, más hermoso que abril!

¡Calla, calla, princesa dice el hada madrina,
en caballo con alas, hacia acá se encamina,
en el cinto la espada y en la mano el azor,
el feliz caballero que te adora sin verte,
y que llega de lejos, vencedor de la Muerte ,
a encenderte los labios con su beso de amor!

"Amo, amas"

Amar, amar, amar, amar siempre, con todo
el ser y con la tierra y con el cielo,
con lo claro del sol y lo oscuro del lodo;
amar por toda ciencia y amar por todo anhelo.

Y cuando la montaña de la vida
nos sea dura y larga y alta y llena de abismos,
amar la inmensidad que es de amor encendida
¡y arder en la fusión de nuestros pechos mismos!

"Lo Fatal" (CANTOS DE VIDA Y ESPERANZA)
Dichoso el árbol, que es apenas sensitivo,
y más la piedra dura porque esa ya no siente,
pues no hay dolor más grande que el dolor de ser vivo,
ni mayor pesadumbre que la vida consciente.

Ser, y no saber nada, y ser sin rumbo cierto,
y el temor de haber sido y un futuro terror…
Y el espanto seguro de estar mañana muerto,
y sufrir por la vida y por la sombra y por

lo que no conocemos y apenas sospechamos,
y la carne que tienta con sus frescos racimos,
y la tumba que aguarda con sus fúnebres ramos,

¡y no saber a dónde vamos,
ni de dónde venimos!…

https://www.poemas-del-alma.com/a-margarita-debayle.htm

Modernismo en España

"Ocaso"- Manuel Machado

Era un suspiro lánguido y sonoro
la voz del mar aquella tarde... El día,
no queriendo morir, con garras de oro
de los acantilados se prendía.

Pero su seno el mar alzó potente,
y el sol, al fin, como en soberbio lecho,
hundió en las olas la dorada frente,
en una brasa cárdena deshecho.

Para mi pobre cuerpo dolorido,
para mi triste alma lacerada,
para mi yerto corazón herido,
para mi amarga vida fatigada...
¡el mar amado, el mar apetecido,
el mar, el mar, y no pensar nada...!

La generación del 98

La Generación del 98 es un conjunto de escritores intelectuales que realizan una profunda crítica de la situación de España y toman su nombre del desastre del 98.

  • Su principal empeño será intervenir en la regeneración de la vida pública, mostrando las miserias y lacras de la sociedad española.
  • En 1901 Azorín (José Martínez Ruiz) forma con Pío Baroja y Ramiro de Maeztu el “Grupo de los tres”, y en 1913 inventa el nombre de Generación del 98.
  • Además de Baroja y Azorín, los otros tres grandes escritores que se han considerado integrantes de esta generación son: Miguel de Unamuno, Antonio Machado y Ramón María del Valle-Inclán.

Temas

  • España y Europa: El 98 busca hacer frente a los problemas nacionales y, para ello, apuestan por la «europeización de España», pero también por la «españolización de Europa»
    • Paisaje y la historia nacional. Recurren al mito de Castilla medieval, en la que encuentran el germen de una España auténtica, libre y dominadora.
    • Su amor a España no es incompatible con la crítica a la sociedad (a las clases dirigentes, pero también a los vicios nacionales: la pereza, la envidia, la mediocridad…)+ visión crítica de la historia nacional.
    • Unamuno acuña el término de intrahistoria para referirse a las costumbres y modos de vida de los hombres anónimos.
  • Reflexiones filosóficas. Los noventayochistas reflexionan sobre el sentido de la vida, la religión, la existencia de Dios, la condición humana, la educación, la identidad…
    • Plasmarán en sus textos literarios las corrientes filosóficas del irracionalismo europeo: el pensamiento de Nietzsche, Schopenhauer o Kierkegaard.
    • Serán frecuentes en sus escritos reflexiones en torno al tiempo cuyo transcurso irrevocable se percibe de forma angustiosa, la soledad, como lugar necesario de encuentro con uno mismo o el sueño, como único medio de evasión ante el desengaño y el pesimismo que caracteriza la época.
  • Estilo: se caracteriza por la sobriedad y la búsqueda de un lenguaje natural, antirretórico.
    • Los noventayochistas huyen de la elaboración formal y el ornamento e intentan exponer su ideario con la máxima claridad y llaneza. El lenguaje pretende ser sencillo y preciso.
  • La preocupación por los problemas de España les hace subordinar la forma al contenido. De ahí que recurran preferentemente al ensayo, que se convierte en el principal género de divulgación ideológica.
  • Por otra parte, su espíritu inconformista les lleva a romper y a renovar los moldes clásicos de los géneros literarios, creando nuevas formas en todos ellos:

Autores de la generación del 98

 MIGUEL DE UNAMUNO (1864-1936)

Biografía

  • Nacido el 29 de septiembre de 1864 en Bilbao, fue un influyente filósofo, escritor, poeta y uno de los principales exponentes de la Generación del 98.
  • Estudió filosofía y letras en la Universidad de Madrid, donde se doctoró con la tesis «Crítica del problema sobre el origen y prehistoria de la raza vasca«.
  • Posteriormente, accedió a la cátedra de lengua y literatura griega en la Universidad de Salamanca, donde desde 1901 fue rector y catedrático de historia de la lengua castellana.
  • Fue destituido de su cargo de rector en dos ocasiones debido a sus posturas políticas. La primera ocasión, por el dictador Primo de Rivera, y la segunda, por el gobierno de la República de Azaña. Falleció el 31 de diciembre de 1936 en Salamanca.

Dedicó la totalidad de su obra, tanto narrativa como dramática, a la expresión de sus inquietudes más profundas. Cultivó todos los géneros: ensayos, novelas, poesía y teatro. 

  • Novela: Son novelas de personaje, con una extrema importancia del diálogo para comunicar ideas. Por eso se dice de ellas que se acercan al género dramático. Con frecuencia los personajes representan una idea.
    • Abel Sánchez: La envidia; Niebla: relaciones creador-criatura; La tía Tula: fanatismo; San Manuel Bueno, mártir: la pérdida de la fe.

  • Ensayos: En ellos desgrana su pensamiento. En En torno al casticismo, en el que trata el problema de España expone la necesidad de europeizar España y acuña su concepto de intrahistoria. En Del sentimiento trágico de la vida, Unamuno se debate entre tres ideas: El miedo a la muerte, la necesidad de creer en un dios que garantice la inmortalidad y dé sentido a la existencia, y la certeza absoluta de que ese dios no existe. 


"Credo poético"
Piensa el sentimiento, siente el pensamiento;
que tus cantos tengan nidos en la tierra,
y que cuando en vuelo a los cielos suban
tras las nubes no se pierdan.

Peso necesitan, en las alas peso
la columna de humo se disipa entera,
algo que no es música es la poesía,
la pesada sólo queda.

Lo pensado es, no lo dudes, lo sentido.
¿Sentimiento puro? Quien en ello crea,
de la fuente del sentir nunca ha llegado
a la vida y honda vena.

No te cuides en exceso del ropaje,
de escultor, no de sastre es tu tarea,
no te olvides de que nunca más hermosa
que desnuda está la idea.

No el que un alma encarna en carne, ten presente,
no el que forma da a la idea es el poeta
sino que es el que alma encuentra tras la carne,
tras la forma encuentra idea.

De las fórmulas la broza es lo que hace
que nos vele la verdad, torpe, la ciencia;
la desnudas con tus manos y tus ojos
gozarán de su belleza.

Busca líneas de desnudo, que aunque trates
de envolvernos en lo vago de la niebla,
aún la niebla tiene líneas y se esculpe;
ten, pues, ojo, no las pierdas.

Que tus cantos sean cantos esculpidos,
ancla en tierra mientras tanto que se elevan,
el lenguaje es ante todo pensamiento,
y es pensada su belleza.

Sujetemos en verdades del espíritu
las entrañas de las formas pasajeras,
que la Idea reine en todo soberana;
esculpamos, pues, la niebla.

"Castilla"
Tú me levantas, tierra de Castilla,
en la rugosa palma de tu mano,
al cielo que te enciende y te refresca,
al cielo, tu amo.

Tierra nervuda, enjuta, despejada,
madre de corazones y de brazos,
toma el presente en ti viejos colores
del noble antaño.

Con la pradera cóncava del cielo
lindan en torno tus desnudos campos,
tiene en ti cuna el sol y en ti sepulcro
y en ti santuario.

Es todo cima tu extensión redonda
y en ti me siento al cielo levantado,
aire de cumbre es el que se respira
aquí, en tus páramos.

¡Ara gigante, tierra castellana,
a ese tu aire soltaré mis cantos,
si te son dignos bajarán al mundo
desde lo alto!

Oración del ateo
Oye mi ruego Tú, Dios que no existes,
y en tu nada recoge estas mis quejas,
Tú que a los pobres hombres nunca dejas
sin consuelo de engaño. No resistes

a nuestro ruego y nuestro anhelo vistes.
Cuando Tú de mi mente más te alejas,
más recuerdo las plácidas consejas
con que mi alma endulzóme noches tristes.

¡Qué grande eres, mi Dios! Eres tan grande
que no eres sino Idea; es muy angosta
la realidad por mucho que se expande

para abarcarte. Sufro yo a tu costa,
Dios no existente, pues si Tú existieras
existiría yo también de veras.


Salmo II

Fe soberbia, impía,
la que no duda,
la que encadena a Dios a nuestra idea.
(...)
La vida es duda,
y la fe sin la duda es sólo muerte.
Y es la muerte el sustento de la vida,
y de la fe la duda.

Mientras viva, Señor, la duda dame,
fe pura cuando muera;
la vida dame en vida
y en la muerte la muerte,
dame, Señor, la muerte con la vida.

Tú eres el que eres;
si yo te conociera
dejaría de ser quien soy ahora,
en ti me fundiría,
siendo Dios como Tú, Verdad suprema.

Dame vivir en vida,
dame morir en muerte,
dame en la fe dudar en tanto viva,
dame la pura fe luego que muera.
Lejos de mí el impío pensamiento
de tener tu verdad aquí en la vida,
pues sólo es tuyo
quien confiesa, Señor, no conocerte.

Lejos de mí, Señor, el pensamiento
de enterrarte en la idea,
la impiedad de querer con raciocinios
demostrar tu existencia.

Yo te siento, Señor, no te conozco,
tu Espíritu me envuelve,
si conozco contigo,
si eres la luz de mi conocimiento,
¿cómo he de conocerte, Inconocible?
La luz por la que vemos
es invisible.

Creo, Señor, en Ti, sin conocerte.
Mira que de mi espíritu los hijos,
de un espíritu mudo viven presos,
libértalos, Señor, que caen rodando
en fuego y agua;
libértalos, que creo,
creo, confío en Ti, Señor; ayuda
mi desconfianza.

«El Cristo de Velázquez»

https://www.elespanol.com/el-cultural/blogs/entreclasicos/20170629/fe-unamuno/227597241_12.html : «La Fe de Unamuno»

“¿No elogiamos a los que se dejaron matar peleando antes que rendirse? Pues esta es mi religión”. Ni católico, ni luterano, ni calvinista, ni ateo, ni racionalista. No acepta ninguna de esas definiciones, que eximen de pensar, proporcionando una falsa tranquilidad: “yo no quiero dejarme encasillar, porque yo, Miguel de Unamuno, como cualquier otro hombre que aspire a conciencia plena, soy especie única”. La libertad es el rasgo distintivo del que busca insobornablemente la verdad. Unamuno admite que su corazón se identifica con el cristianismo, pero no con las iglesias que administran su legado, descalificándose mutuamente con odio cainita. “Considero cristiano a todo el que invoca con respeto y amor el nombre de Cristo, y me repugnan los ortodoxos, sean católicos o protestantes”, particularmente cuando condenan y repudian “a quienes no interpretan el Evangelio como ellos”.

El 6 de noviembre de 1907 publicó Unamuno un artículo esclarecedor en el periódico bonaerense La Nación, que tituló “Mi religión»

  PÍO BAROJA

Novelista por antonomasia, casi todas sus novelas tienen un personaje individual, héroe o antihéroe, hombre de acción o de reflexión. Quizá trasuntos ambos del propio autor, y herencia directa de los filósofos que Baroja había leído: El hombre de acción, (superhombre de Nietzsche) que actúa (Zalacaín el aventurero) y la paralizante y pesimista del que reflexiona, al estilo de Schopenhauer,  (El árbol de la ciencia),obra que tiene como protagonista al estudiante de medicina Andrés hurtado y trata temas tales como el caciquismo, el patriotismo hipócrita, la estulticia, el materialismo, el idealismo, el nihilismo, la muerte, la resignación o el suicidio.

 AZORÍN

Algunas de sus novelas más destacadas: Castilla, La voluntad, Antonio Azorín y Las confesiones de un pequeño filósofo. En sus obras se desdibuja la frontera entre ensayo y novela, porque en estas últimas se pierde el hilo argumental. Todas ellas dan rienda suelta a reflexiones variadas y a evocaciones del paisaje, con un estilo impresionista.

 RAMÓN MARÍA DEL VALLE-INCLÁN

En cuanto a su narrativa, participa de la misma evolución que su teatro:

  • Comienza con una etapa modernista, las Sonatas (de estío, de invierno, de primavera y de otoño), en que se narran las aventuras del marqués de Bradomín, un don Juán, aristocrático y amoral, exquisito y aventurero, que aún conserva la capacidad de seducir a las mujeres.
  • La segunda etapa, la primitivista, presenta una  Galicia rural, brutal, de pasiones desbordadas, con ritos mágicos, leyendas, supersticiones, malditismo… La  guerra  carlista, formada por tres novelas, corresponde cronológicamente y por ciertos rasgos de estilo a esta etapa.
  • Finalmente, en la etapa del esperpento Valle publica Tirano Banderas que supone una novedad por trasladar a la narrativa el género teatral por él inventado y por desarrollarse en tierras americanas. Valle inaugura así el género de las novelas de dictador.

ANTONIO MACHADO

  • Biografía:
    • Antonio Machado fue un destacado poeta, dramaturgo y narrador español, nacido en Sevilla el 26 de julio de 1875 y fallecido en Colliure, Francia, el 22 de febrero de 1939.
    • Machado se formó en la Institución Libre de Enseñanza y completó sus estudios en la Universidad de Madrid. Durante su vida, viajó a París, donde conoció a importantes figuras literarias.
    • Al aprobar la oposición de profesor de Francés en secundaria, ejerció en varias diferentes provincias: Soria, donde conoce a Leonor, y tras la muerte de su esposa: Baeza (Jaén) y más tarde: en Madrid.
    • Durante la guerra civil, permaneció en el bando republicano, participando activamente en la defensa ideológica de la República, a medida que avanzaba el bando sublevado, tuvo que trasladarse a Valencia, a Barcelona y, finalmente, exiliarse a Francia, donde moriría en Colliure el 22 de febrero de 1939.

Distinguimos tres etapas en su trayectoria:

  • Soledades: Modernismo decadente y nostálgico. Los poemas de Machado comunican emociones sugiriéndolas, sin explicarlas. Sus versos están llenos de símbolos como el del viajero (el poeta) que recorre un camino (la vida), que sueña (la esperanza) en las tardes (el sentimiento del tiempo que pasa) de primavera (el tiempo del amor) bajo los árboles y dialoga con las fuentes (la vida del poeta).
  • Campos de Castilla: la etapa en la que se acerca a los planteamientos de la generación del 98 en su reflexión sobre la realidad de España, sus tierras y sus gentes.  El paisaje ya o es un símbolo, sino que se vuelve real. Abundan los poemas en que describe a Castilla y sus gentes, así como los Proverbios y cantares, breves poemillas de tono sentencioso y contenido filosófico. 
  • Nuevas canciones: Incluye un nuevo centenar de proverbios, así como poemas de sus alter ego Abel Martín y Juan de Mairena.
SOLEDADES

II
He andado muchos caminos,
he abierto muchas veredas,
he navegado en cien mares
y he atracado en cien riberas.
En todas partes he visto
caravanas de tristezas,
soberbios y melancólicos
borrachos de sombra negra,
y pedantones al paño
que miran, callan y piensan
que saben, porque no beben
el vino de las tabernas.
Mala gente que camina
y va apestando la tierra...
Y en todas partes he visto
gentes que danzan o juegan,
cuando pueden, y laboran
sus cuatro palmos de tierra.
Nunca, si llegan a un sitio,
preguntan adonde llegan.
Cuando caminan, cabalgan
a lomos de mula vieja,
y no conocen la prisa
ni aun en los días de fiesta.
Donde hay vino, beben vino,
donde no hay vino, agua fresca.
Son buenas gentes que viven,
laboran, pasan y sueñan,
y en un día como tantos,
descansan bajo la tierra.

VII
El limonero lánguido suspende
una pálida rama polvorienta
sobre el encanto de la fuente limpia,
y allá en el fondo sueñan
los frutos de oro...
Es una tarde clara,
casi de primavera;
tibia tarde de marzo,
que al hálito de abril cercano lleva;
y estoy solo, en el patio silencioso,
buscando una ilusión cándida y vieja:
alguna sombra sobre el blanco muro,
algún recuerdo en el pretil de piedra
de la fuente dormido, o, en el aire,
algún vagar de túnica ligera.
En el ambiente de la tarde flota
ese aroma de ausencia
que dice al alma luminosa: nunca,
y al corazón: espera.
Ese aroma que evoca los fantasmas
de las fragancias vírgenes y muertas.
Sí, te recuerdo, tarde alegre y clara,
casi de primavera,
tarde sin flores, cuando me traías
el buen perfume de la hierbabuena,
y de la buena albahaca,
que tenía mi madre en sus macetas.
Que tú me viste hundir mis manos puras
en el agua, serena
para alcanzar los frutos encantados
que hoy en el fondo de la fuente sueñan...
Sí, te conozco, tarde alegre y clara,
casi de primavera.

-------
XI
Yo voy soñando caminos
de la tarde. ¡Las colinas
doradas, los verdes pinos,
las polvorientas encinas!...
¿Adónde el camino irá?
Yo voy cantando, viajero
a lo largo del sendero...
-La tarde cayendo está-.
«En el corazón tenía
»la espina de una pasión;
»logré arrancármela mi día,
»ya no siento el corazón».
Y todo el campo un momento
se queda, mudo y sombrío,
meditando. Suena el viento
en los álamos del río.
La tarde más se obscurece,
y el camino que serpea
y débilmente blanquea,
se enturbia y desaparece.
Mi cantar vuelve a plañir:
«Aguda espina dorada,
»quién te pudiera sentir
»en el corazón clavada».


CAMPOS DE CASTILLA

"A un olmo seco"

Al olmo viejo, hendido por el rayo
y en su mitad podrido,
con las lluvias de abril y el sol de mayo
algunas hojas verdes le han salido.

¡El olmo centenario en la colina
que lame el Duero! Un musgo amarillento
le mancha la corteza blanquecina
al tronco carcomido y polvoriento.

No será, cual los álamos cantores
que guardan el camino y la ribera,
habitado de pardos ruiseñores.

Ejército de hormigas en hilera
va trepando por él, y en sus entrañas
urden sus telas grises las arañas.

Antes que te derribe, olmo del Duero,
con su hacha el leñador, y el carpintero
te convierta en melena de campana,
lanza de carro o yugo de carreta;
antes que rojo en el hogar, mañana,
ardas de alguna mísera caseta,
al borde de un camino;
antes que te descuaje un torbellino
y tronche el soplo de las sierras blancas;
antes que el río hasta la mar te empuje
por valles y barrancas,
olmo, quiero anotar en mi cartera
la gracia de tu rama verdecida.
Mi corazón espera
también, hacia la luz y hacia la vida,
otro milagro de la primavera.
----
"A orillas del Duero"
Mediaba el mes de julio. Era un hermoso día.
Yo, solo, por las quiebras del pedregal subía,
buscando los recodos de sombra, lentamente.
A trechos me paraba para enjugar mi frente
y dar algún respiro al pecho jadeante;
o bien, ahincando el paso, el cuerpo hacia adelante
y hacia la mano diestra vencido y apoyado
en un bastón, a guisa de pastoril cayado,
trepaba por los cerros que habitan las rapaces
aves de altura, hollando las hierbas montaraces
de fuerte olor a romero, tomillo, salvia, espliego.
Sobre los agrios campos caía un sol de fuego.
Un buitre de anchas alas con majestuoso vuelo
cruzaba solitario el puro azul del cielo.
Yo divisaba, lejos, un monte alto y agudo,
y una redonda loma cual recamado escudo,
y cárdenos alcores sobre la parda tierra
harapos esparcidos de un viejo arnés de guerra,
las serrezuelas calvas por donde tuerce el Duero
para formar la corva ballesta de un arquero
en torno a Soria. Soria es una barbacana,
hacia Aragón, que tiene la torre castellana.
Veía el horizonte cerrado por colinas
oscuras, coronadas de robles y de encinas;
desnudos peñascales, algún humilde prado
donde el merino pace y el toro, arrodillado
sobre la hierba, rumia; las márgenes de río
lucir sus verdes álamos al claro sol de estío,
y, silenciosamente, lejanos pasajeros,
¡tan diminutos! carros, jinetes y arrieros,
cruzar el largo puente, y bajo las arcadas
de piedra ensombrecerse las aguas plateadas
del Duero.
El Duero cruza el corazón de roble
de Iberia y de Castilla.
¡Oh, tierra triste y noble,
la de los altos llanos y yermos y roquedas,
de campos sin arados, regatos ni arboledas;
decrépitas ciudades, caminos sin mesones,
y atónitos palurdos sin danzas ni canciones
que aún van, abandonando el mortecino hogar,
como tus largos ríos, Castilla, hacia la mar!
Castilla miserable, ayer dominadora,
envuelta en sus andrajos desprecia cuanto ignora.
¿Espera, duerme o sueña? ¿La sangre derramada
recuerda, cuando tuvo la fiebre de la espada?
Todo se mueve, fluye, discurre, corre o gira;
cambian la mar y el monte y el ojo que los mira.
¿Pasó? Sobre sus campos aún el fantasma yerta
de un pueblo que ponía a Dios sobre la guerra.
La madre en otro tiempo fecunda en capitanes,
madrastra es hoy apenas de humildes ganapanes.
Castilla no es aquella tan generosa un día,
cuando Myo Cid Rodrigo el de Vivar volvía,
ufano de su nueva fortuna, y su opulencia,
a regalar a Alfonso los huertos de Valencia;
o que, tras la aventura que acreditó sus bríos,
pedía la conquista de los inmensos ríos
indianos a la corte, la madre de soldados,
guerreros y adalides que han de tornar, cargados
de plata y oro, a España, en regios galeones,
para la presa cuervos, para la lid leones.
Filósofos nutridos de sopa de convento
contemplan impasibles el amplio firmamento;
y si les llega en sueños, como un rumor distante,
clamor de mercaderes de muelles de Levante,
no acudirán siquiera a preguntar ¿qué pasa?
Y ya la guerra ha abierto las puertas de su casa.
Castilla miserable, ayer dominadora,
envuelta en sus harapos desprecia cuanto ignora.
El sol va declinando. De la ciudad lejana
me llega un armonioso tañido de campana,
ya irán a su rosario las enlutadas viejas.
De entre las peñas salen dos lindas comadrejas;
me miran y se alejan, huyendo, y aparecen
de nuevo, ¡tan curiosas!… Los campos se obscurecen.
Hacia el camino blanco está el mesón abierto
al campo ensombrecido y al pedregal desierto.

VI
¡Soria fría, Soria pura,
cabeza de Extremadura,
con su castillo guerrero
arruinado, sobre el Duero;
con sus murallas roídas
y sus casas denegridas!
¡Muerta ciudad de señores
soldados ó cazadores;
de portales con escudos
de cien linajes hidalgos,
y de famélicos galgos,
de galgos flacos y agudos,
que pululan,
por las sórdidas callejas
y á la media noche ululan
cuando graznan las cornejas!
¡Soria fría! La campana
de la Audiencia da la una.
Soria, ciudad castellana
¡tan bella! bajo la luna.
VII
¡Colinas plateadas,
grises alcores, cárdenas roquedas
por donde traza el Duero
su curva de ballesta
en torno á Soria; oscuros encinares,
ariscos pedregales, calvas sierras,
caminos blancos y álamos del río;
tardes de Soria, mística y guerrera,
hoy siento por vosotros, en el fondo
del corazón, tristeza,
tristeza que es amor! ¡Campos de Soria
donde parece que las rocas sueñan,
conmigo váis!... ¡Colinas plateadas,
grises alcores, cárdenas roquedas!
VIII
He vuelto á ver los álamos dorados,
álamos del camino en la ribera
del Duero, entre San Polo y San Saturio,
tras las murallas viejas
de Soria -barbacana
hacia Aragón, en castellana tierra.
Estos chopos del río, que acompañan
con el sonido de sus hojas secas
el son del agua cuando el viento sopla,
tienen en sus cortezas
grabadas iniciales que son nombres
de enamorados, cifras que son fechas.
¡Álamos del amor que ayer tuvisteis
de ruiseñores vuestras ramas llenas;
álamos que seréis mañana liras
del viento perfumado en primavera;
álamos del amor cerca del agua
que corre y pasa y sueña,
álamos de las márgenes del Duero,
conmigo váis, mi corazón os lleva!
IX
¡Oh!, sí, conmigo váis, campos de Soria,
tardes tranquilas, montes de violeta,
alamedas del río, verde sueño
del suelo gris y de la parda tierra,
agria melancolía
de la ciudad decrépita,
¿me habéis llegado al alma,
ó acaso estábais en el fondo de ella?
¡Gente del alto llano numantino
que guarda á Dios como cristiana vieja,
que el sol de España os llene
de alegría, de luz y de riqueza!


- PROVERBIOS Y CANTARES
I
Nunca perseguí la gloria

ni dejar en la memoria

de los hombres mi canción;

yo amo los mundos sutiles,

ingrávidos y gentiles

como pompas de jabón.

Me gusta verlos pintarse

de sol y grana, volar

bajo el cielo azul, temblar

súbitamente y quebrarse.



II

¿Para qué llamar caminos

a los surcos del azar?…

Todo el que camina anda,

como Jesús, sobre el mar.



III

A quien nos justifica nuestra desconfianza

llamamos enemigo, ladrón de una esperanza.

jamás perdona el necio si ve la nuez vacía

que dio a cascar al diente de la sabiduría.



IV

Nuestras horas son minutos

cuando esperamos saber,

y siglos cuando sabemos

lo que se puede aprender.



V

Ni vale nada el fruto

cogido sin sazón…

Ni aunque te elogie un bruto

ha de tener razón.



VI

De lo que llaman los hombres

virtud, justicia y bondad,

una mitad es envidia,

y la otra no es caridad.

XXIII
Caminante, son tus huellas
el camino y nada más;
Caminante, no hay camino,
se hace camino al andar.
Al andar se hace el camino,
y al volver la vista atrás
se ve la senda que nunca
se ha de volver a pisar.
Caminante no hay camino
sino estelas en la mar.

Publicado por Soledad del Cañizo

Experta en nubes y profesora de lengua.

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